Tolerancia a la frustración
Tolerancia a la frustración hace referencia a aquella circunstancia en la que las cosas no han salido como esperábamos pero, aún así, continuamos con perseverancia (aunque, efectivamente, no nos guste).
Cuando un deseo o una ilusión no se cumple, a causa de la frustración, el sujeto puede reaccionar por el camino del enfado, la agresividad o en forma más extrema la violencia.
También puede generar, desde un estado de contención e inhibición es decir no reacción, sentimientos de tristeza, pesimismo, temor que con el tiempo se va relacionar con otro concepto, la desmotivación.
Por lo tanto, estaríamos ante que personas que, con una situación mínima o pequeña sería suficiente para que se asuste, se enfade y se muestre hostil, se ponga triste, o se desmotive en su hacer.
Esto denota que en algún punto al sujeto le falta algo y en consecuencia de esta falta, la emoción de cólera, de miedo o de tristeza se produce al mínimo estímulo.