Crisis personales

Las personas solemos tener la idea de que las cosas «son como son». De ahí que muchos, cuando nos encontramos en momentos de la vida en los que se aproximan cambios, ya sean deseados, o no, entramos a ellos conectamos con estados emocionales disfuncionales (o no productivos).

Parece que prima la idea de que la vida debería ser un lugar tranquilo donde vivir y que a medida que vamos creciendo, hemos de tenerlo todo (o casi todo) bajo control.

Aceptar la imprevisibilidad de la vida, las imperfecciones que tiene la vida, las personas y las relaciones, nos dará la oportunidad para adaptarnos a los cambios que toda vida conlleva.

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